Las razones por las que nos hemos hecho tan dependientes al smartphone
Hoy en día no nos podemos imaginar viviendo sin el smartphone, la era de la tecnología nos ha obligado a contar con un dispositivo móvil y no podemos despegar la vista de él, siempre estamos listos para pulsar la pantalla para ver la siguiente foto o video, el proceso se repite todos los días. ¿Cómo es que los teléfonos celulares llegaron a ser tan indispensables? Aquí platicaremos acerca un poco del tema y estamos seguros de que al final estarás de acuerdo con nosotros.
La dependencia por el teléfono móvil nos puede llevar desde la incomodidad, el aburrimiento, y hasta la angustia cuando no lo tenemos con nosotros, y es que nos hace compañía a todas horas, incluyendo en esos tediosos momentos cuando vamos en el transporte público o estamos haciendo fila para un nefasto trámite gubernamental. En estos momentos el smartphone es nuestro mejor amigo porque podemos matar el tiempo en una enorme variedad de actividades.
Por ejemplo podemos ver en una película en nuestro servicio de streaming favorito como pueden ser Netflix o Hulu, leer un libro descargado de Amazon, o hasta entrarle a un casino en línea, que ofrecen una gran variedad de juegos distintos, como es el caso de las tragaperras en William Hill, que además de ofrecer muchas temáticas diferentes, pueden dar bonos de hasta el 100%.
Pero no todo es ocio y diversión con nuestros dispositivos móviles, porque ahora nos sirven para realizar actividades laborales que estaban reservadas para los ordenadores de escritorio o las laptops, como lo es mandar correos electrónicos, elaborar documentos en formato Word, o tener videoconferencias. Ahora los smartphones son tan potentes que pueden desempeñar esas y muchas actividades más. Ya son una especie de asistente personal que nos ayuda a desahogar múltiples tareas de manera simultánea.
Y claro que no nos estábamos olvidando del uso más común que tienen todos los dispositivos móviles: las redes sociales. Sea Facebook, Twitter, Instagram, o Snapchat, se ha convertido en una necesidad el estar revisando de manera constante qué novedades hay, aun y cuando han pasado apenas unos minutos desde la última vez que revisamos. De hecho hay estudios que revelaron que cuando una persona recibe un “me gusta” en redes sociales se libra una dosis alta de dopamina, lo cual explica ese gusto por estar esperando la aprobación de terceros.
Más allá de todos estos usos, el smartphone sigue cumpliendo con su propósito original, el cual es recibir y hacer llamadas, además de los respectivos mensajes de texto por supuesto. Antes de que existieran los celulares dependíamos de las líneas telefónicas tradicionales, lo cual era poco práctico porque no era posible estar sentados junto al teléfono todo el día esperando una llamada. Hoy en día es posible tener una conversación telefónica en cualquier lugar del mundo, el móvil va a donde estemos y nos hace accesibles.
Con todo esto a favor del smartphone es imposible no tenerlo junto a nosotros a cada segundo y es que ni para ir al baño lo soltamos. Aquí también aplica la frase: “hasta que la muerte nos separe”.