Midwest Silicon Prairie, nuevo paraíso de los emprendedores tecnológicos

Omaha Fuente: Pixnio

Todos conocemos Silicon Valley, ese lugar en el que se concentran las empresas tecnológicas más importantes del mundo. Ese área, situada en la costa oeste de Estados Unidos, cerca de la ciudad de San Francisco (California), era un centro industrial destacado incluso antes de la invasión de compañías basadas en las nuevas tecnologías; de hecho, el nombre “Silicon Valley” (valle del silicio) viene de la gran cantidad de industrias que había en la zona y que trabajan con ese material, el silicio, ya en los años 70.

Sin embargo, Silicon Prairie puede resultar más desconocido. En este caso el nombre es una clara referencia a la comunidad de San Francisco, pero en lugar de hacer señalar un solo sitio, se puede aplicar a varios. Hay al menos tres áreas de Estados Unidos a las que se les refiere como Silicon Prairie; lo que tienen en común es la concentración de empresas dedicadas a las telecomunicaciones y nuevas tecnologías.

Chicago es la ciudad principal del Silicon Prairie del estado de Illinois, donde sobre todo hay empresas de telefonía como Motorola o Alcatel. En el norte de Texas, encontramos el Dallas-Fort Worth Silicon Prairie, que aparece en las primeras dos temporadas de la serie de televisión Halt and Catch Fire, basada en los primeros años del desarrollo de la informática. Y existe un tercer Silicon Prairie que incluye localizaciones de varios estados del interior de Estados Unidos; el Midwest Silicon Prairie se está convirtiendo en un lugar muy atractivo tanto para empresarios que ya tienen compañías consolidadas como para nuevos emprendedores.

Situado en la heartland, el corazón de Estados Unidos, se considera que el Silicon Prairie del Medio Oeste lo integran varias localidades de los estados que atraviesa la carretera interestatal 29, I-29. En concreto son Nebraska, Iowa, Dakota del Sur y del Norte, Kansas, Minnesota y Missouri.

Es una zona a la que en Estados Unidos tradicionalmente se le ha llamado estados fly-over, es decir, un lugar de paso. Existe una anécdota sobre una de las ciudades más representativas del Midwest Silicon Prairie, Des Moines (Iowa), que sirve para ilustrar la fama que estos lugares tienen de ser sitios aburridos en los que no hay nada que hacer. En los años 90, hubo una apuesta en la que se retó al jugador de poker John Hennigan a vivir un mes en Des Moines a cambio de 25.000$; cuenta la leyenda que Hennigan, acostumbrado a la vida de Las Vegas, aguantó dos días. En los últimos años, esta fama está demostrando ser totalmente inmerecida. A día de hoy Des Moines ha sido elegida en varias ocasiones como una de las mejores ciudades para vivir en Estados Unidos.

Des Moines Fuente: Pixabay

Las ventajas de Des Moines, y de Silicon Prairie en general, con respecto a Silicon Valley están precisamente en su buen nivel de vida. Por ejemplo, mientras que los trabajadores de las empresas que están en San Francisco suelen tardar más de una hora en llegar a sus puestos, para los de Silicon Prairie en las ciudades del Medio Oeste la media ronda los 20 minutos. El precio medio de la vivienda en el área de Silicon Valley es de casi el millón de dólares, mientras que en la ciudad de Iowa no llega a los $200.000. Comprar una casa o un local desde el que desarrollar un negocio cuesta casi cinco veces más, pero los salarios medios para los trabajadores del sector tecnológico solamente son alrededor de un 40% mayores en California que en el Medio Oeste. Los emprendedores están empezando ver el Midwest Silicon Prairie como un buen lugar para invertir, con muchas oportunidades que llaman a nuevas oportunidades.

Una de las ciudades que está poniéndose a la cabeza de la revolución tecnológica en el Medio Oeste es Omaha (Nebraska). A este lugar le pasaba como a Des Moines. Hasta hace unos años el nombre de Omaha era conocido porque es el que se le da a una de las variantes más populares del juego de poker, pero pocos sabían situar la ciudad. Ahora Omaha es un referente en la zona y se está convirtiendo en uno de los centros de negocios e investigación más interesantes de Estados Unidos.

Desde Omaha se está trabajando mucho para promover Silicon Prairie y atraer así nuevos proyectos e inversiones. Han creado un diario específico, Silicon Prairie News, cuentan con sus propios galardones para la industria, los Silicon Prairie Awards, y se organizan eventos especializados con frecuencia. Destaca el Big Omaha, que se celebra desde hace unos y se presenta como “la conferencia sobre innovación y emprendimiento más inspiradora, visionaria, colaborativa, creativa y enérgica del país”; la edición de 2018 se ha integrado en el festival de música Maha Music Festival, dando a conocer así las charlas a un público más amplio.

El Medio Oeste norteamericano, que siempre había quedado como ese pedazo de terreno que separa ciudades tan importantes como Nueva York y San Francisco, se está reivindicando gracias al sector de las nuevas tecnologías. Silicon Prairie es un lugar discreto desde el que se están haciendo grandes cosas.